Las razones por las que pienso se mantienen las desigualdades entre países en la actualidad vienen dadas, desde mi punto de vista, por la explotación que se da desde los países más poderosos económicamente sobre los recursos de aquellos con menos posibilidades, como, por ejemplo, la importación de las materias primas y su compra a un precio irrisorio para su posterior comercialización a precios mucho más altos por estos tras una simple transformación. Este hecho ha ocurrido en nuestro entorno durante muchos años y considero que, si realmente queremos compensar las desigualdades, se debería promover una regulación de precios real y la producción y desarrollo de los diferentes productos desde el entorno de origen, importándose los productos ya elaborados y a un precio adecuado de mercado.
